Todos debemos hacer nuestra parte
Quédate en casa. Esa es la receta para frenar la propagación del coronavirus. Quédate en casa y protégete a ti mismo y a tus familiares y amigos. Quédate en casa y evita la propagación de este peligroso virus que amenaza la estabilidad de cosas tan mundanas y que teníamos tan asumidas como la sanidad, la educación o el tiempo libre. A menudo se pone el ejemplo de las cerillas que juntas permiten la propagación del virus pero que al quitar una rompemos la cadena, por eso es tan importante quedarse en casa. Porque tenemos que ser la cerilla.
También podemos aplicar esta metáfora a la propagación de bulos y de mensajes de odio; corren por la red como el fuego. Saltan de un móvil a otro, de una persona a todo su círculo y antes de darnos cuenta ya no se puede parar. Por eso, ahora más que nunca tenemos que ser la cerilla que rompe esa cadena, porque la mezcla de miedo y desinformación es muy peligrosa.
Está en tu mano frenar la propagación de bulos
Sé la cerilla que se queda en casa, si. Pero también sé la cerilla que no comparte un audio de dudosa procedencia. Sé la cerilla que contrasta la información sobre cómo luchar contra el virus, sé la cerilla que no comparta mensajes que culpan a la población china y sé la cerilla que no se inventa datos o se ríe de las personas enfermas y sobre todo sé la cerilla que consuma los medios de forma responsable, crítica y fundamentada. Y si en algún momento sientes la necesidad que compartir algo, que sea bueno.
Nos esperan días muy tensos, donde no necesitamos ni tristeza ni sufrimiento,necesitamos el calor y la luz que desprenden las cerillas para contagiar amor.